No es la ausencia de miedo lo que te define, sino la acción a pesar de él. El verdadero carácter se forja en esos momentos donde la valentía es la única elección, guiada por la sabiduría de saber por qué luchas.
El verdadero éxito es una sinfonía entre tu carácter inquebrantable, la melodía de tu sabiduría y el ritmo constante de tu motivación. Dirígela cada día.